Alternativa de Inversión

 

Trabajo colavorativo

Una de las ideas de este espacio es la posibilidad de dar información financiera a las personas que recién se están incorporando a este mundo y, en ese sentido poder entregar algunas recomendaciones que son más útiles mientras antes las vamos implementando, ya que hemos hablado en el pasado del efecto del interés compuesto, además de que el tiempo es un elemento invaluable en el mundo de las inversiones.

Entonces siguiendo con ese espíritu, les vengo a comentar sobre una alternativa de inversión poco conocida en el mundo nacional, pero que tiene un potencial gigante que se va consolidando con el tiempo y que por lo mismo, el ideal es poder permanecer en esta alternativa el mayor tiempo posible.

De que se trata

La alternativa en particular se llama “Cuotas de Participación” y en particular es ofrecida por una cooperativa nacional llamada “Coopeuch”, cabe destacar que no trabajo en la fuerza de venta de Coopeuch, ni es contenido patrocinado ni nada por el estilo, pero quizás al final puedan identificar cual es el truco (ja!).

De que se trata este instrumento, pues bien, esta cooperativa ofrece este instrumento a cualquiera que quiera optar por el, para ello tienes que ir a una sucursal, ya que hasta el momento no sé si se puede hacer de forma on line; en la sucursal firmas unos papeles en los que te comprometes a comprar una cierta cantidad de cuotas cada mes, el monto es completamente a tu elección, solo que no puede ser más allá de cierta cantidad, por ejemplo 60 cuotas mensuales.

¿Cual es la gracia de comprar estas cuotas?, bueno es lo más similar a comprar acciones en esta cooperativa y de hecho al adquirir cuotas te haces socio de la cooperativa, además como ocurre con algunas acciones, estas cuotas te entregan dividendos una vez al año (en el mes de mayo) y, mientras más cuotas tengas más dinero te llegara, a esto se le llama “remanente”.

El remanente se calcula en base a como le fue en el año a la cooperativa y, será más gordito si más gente utilizo sus productos, mientras más gente pida créditos (y los pague) así como también el uso de las diferentes ofertas comerciales de la cooperativa, como créditos hipotecarios, de consumo, depósitos a plazo y el manejo de tarjetas (cuentas corrientes).

Hasta el momento no se ve como nada del otro mundo, pero a estas alturas ya deberíamos ser capaces de ver el gran potencial de esta herramienta de inversión y sobre todo considerando el bajo costo que ella tiene. Por ejemplo si consideramos comprometernos a comprar 10 mil en cuotas cada mes, no es un monto demasiado alto ni va a causar un gran desajuste a nuestras finanzas mensuales.

Una de las cosas que tenemos que considerar es que el primer y segundo año de mantenernos en este instrumento el efecto que veremos será muy poco notorio, ya que tendremos muy pocas cuotas, es muy simple ver que si se reparten 100 pesos por cada cuota y solo tenemos 100 cuotas vamos a recibir 10 mil, aunque no es tan así, ya que si el monto es menor a cierto valor, por ejemplo 10 mil, en ese caso no te pasan el dinero si no que te dan una cierta cantidad de cuotas extra, esto puede ocurrir el primer o segundo año, va a depender cuantas cuotas te vas a comprometer a pagar mensualmente, por eso un valor de 10 mil es recomendado, pero depende solo de ti. Por otro lado el monto que vayamos acumulando en nuestra cuenta esta disponible siempre para cuando lo necesitemos, es decir que si en algún momento necesitamos recuperar ese dinero podemos vender nuestras cuotas ya compradas y retirar el dinero, pero lo malo es que si quieres volver a comprar, tienes que partir desde cero acumulando cuotas.

Pero siguiendo con el ejemplo anterior, si ya llevamos unos años y, el monto a repartir es de 100 pesos por cuota y ya tenemos unas 1000 cuotas, entonces el monto que recibiremos será de 100 mil, entonces claramente podemos ver que el juego acá es solo el tiempo que permanezcamos  acumulando cuotas de participación. Ahora bien también afecta a que tan bien le vaya a la cooperativa, en el sentido de que mientras más clientes tenga, eso afectara de alguna manera al monto a pagar por cada cuota.

Un ejemplo

Otra mirada que le podemos dar es la siguiente, por ejemplo si nos comprometemos a comprar una cantidad de cuotas equivalentes a 10 mil mensual, al cabo de un año habrás aportado 120 mil, como ya se dijo antes ese monto sigue siendo tuyo y lo puedes ver como un ahorro. Al año siguiente realizas el mismo aporte, otros 120 mil, pero te llega un remanente de 5 mil (es solo un ejemplo) entonces en realidad tu aporte no fue de 120 mil, si no de 115 mil. Pasando al tercer año de aportes recibes un remanente de 25 mil, ya que tienes más cuotas entonces este valor siempre se ira incrementando; entonces haciendo el mismo calculo, tu aporte ya no fue de 120 mil, si no que de 95 mil.

Entonces si ya entendimos el truco del punto anterior, es solo un tema de tener la paciencia suficiente para que con los años veamos que el aporte que hacemos al fondo en algún momento será cero, ya que con el pago del remanente podremos pagar todas las cuotas de año (idealmente); pero ¿Qué pasa al año siguiente? Pues al año siguiente y teniendo en cuenta de que idealmente todos los años estaremos recibiendo un poco más de remanente, entonces podremos pagar todas las cuotas del año e ira quedando un monto cada vez mayor, el cual se puede constituir en un ingreso pasivo.

Ahora bien mi recomendación es que cuando veas que el monto del remanente empieza a subir y te ayuda a pagar por las cuotas mensuales, también seas capaz de, en la medida de lo posible, llegar más cerca a la cantidad máxima de cuotas de participación que puedas comprar mes a mes; de hecho si es posible que desde el día uno puedas comprar el máximo de cuotas, todo lo anteriormente descrito lo podrás lograr incluso en menos tiempo, pero teniendo en cuenta siempre que debes considerar este instrumento como un ahorro del largo plazo.

En base a todo lo anterior, mi recomendación es que puedas incorporarte a este instrumento lo antes posible, ya que como hemos visto sus ventajas se verán con los años, de hecho no antes de 10 años. Por otro lado una forma de apurar le proceso es poder adquirir mensualmente el máximo de cuotas que te permitan y, si bien en un comienzo puede ser algo más complicado es algo que agradecerás en el futuro. 

 

Imagen de Peggy und Marco Lachmann-Anke en Pixabay