¿Qué Hago Con Este Dinero? (Parte 3)

Opciones de inversion

Supongamos que de pronto tenemos la suerte de recibir una gran cantidad de dinero de forma repentina, más allá de la fuente de ese dinero, que puede ser el resultado de un buen negocio, así como una herencia que no esperabas o incluso el premio de un juego de azar; la pregunta de ¿Qué hacemos con ese dinero ahora? va a depender, como todo en la vida.

Ya antes habíamos visto 2 opciones respecto de que hacer con un dinero repentino, pero esas son solo dos opciones y, la verdad es que opciones hay muchas más, pero lo realmente importante es que la respuesta también puede variar dependiendo mucho de la edad de la persona.

Sin perjuicio de lo anterior, no debemos considerar lo que acá indico, como que es la única forma, ya que si bien la edad es un factor importante al momento de tomar la decisión de qué hacer, debemos recordar que el creador de KFC, la cadena de los pollos, creo el producto después de los 70 años, así que lo que acá detallo, son solo recomendaciones, mas si tienes un sueño que es realmente importante para ti, que la edad no sea una limitante.

Volviendo al tema central, dividamos en 3 grupos a las personas: jóvenes, adultos y personas mayores. Esta separación es totalmente arbitraria en el sentido que no voy a poner un limite y decir que de tal o cual edad es uno u otro, es mejor tener en cuenta que si estas iniciando tu viaje en el mundo laboral o estas aun estudiando, estás en el segmento joven; si ya dejaste de estudiar y estas en un trabajo ya hace unos años de manera consolidada y además ya tienes una familia, estarás casi seguro en el segmento adulto y; si ya estas contemplando la jubilación, entonces estás en el segmento de persona mayor.

Por lo general en términos de inversión si nos planteamos dos ejes siendo uno el riesgo y, por otro lado la edad, podríamos ver que la opinión transversal es que a menor edad, te puedes permitir apostar por instrumentos de mayor riesgo y de mayor plazo, pero el otro extremo es distinto, a mayor edad no te puedes arriesgar y deberías solo considerar instrumentos de riesgo absolutamente controlado y de corto plazo.

Balance de riesgo

Joven

Siendo una persona joven con algo de dinero, la mejor inversión que puedes hacer es en ti mismo. Suele ocurrir que muchas personas no tienen la capacidad de pagar una carrera universitaria o, incluso no les alcanza para estudiar lo que realmente les llama la atención. Si estas en la posición de poder estudiar lo que quieras, ya que no tendrás la preocupación del dinero, ese debería ser tu camino.

Suele ocurrir que mucha gente que no tiene la posibilidad de contar con un patrimonio, termina estudiando la carrera que “pudo” y la logra ejercer, pero con el resentimiento de que no es realmente la opción que hubiera tomado de haber tenido la posibilidad. De estas personas, un porcentaje (lamentablemente) pequeño, logra darse la oportunidad de estudiar la carrera que no pudieron en el pasado, pero típicamente en un horario en la noche y después de salir del trabajo.

Por otro lado, si pensamos en el mundo de las inversiones, la recomendación va más por el lado de los instrumentos que tengan una componente mayor de riesgo, ya que en la situación descrita como premisa, este dinero que destinaremos para esto no es un dinero que necesites para pagar tus gastos inmediatos y en el peor de los casos, tampoco te causaría un daño enorme si lo llegaras a perder todo.

Dentro de los instrumentos de mayor riesgo tenemos las acciones, así como los criptoactivos, acá también podríamos agregar algunos índices internacionales en forma de ETF que ofrecen diversas Fintech nacionales, que te permiten invertir en mercados extranjeros desde el país y en moneda nacional, totalmente regulado y con pago de impuestos.

Por otro lado, para los jóvenes con alma de viejo, también existe la estrategia de las inversiones con interés compuesto, las cuales deben ser de las más aburridas en el mundo de las inversiones, sin embargo tienen un poder que solo puede ser apreciado con el paso del tiempo y, en este sentido voy a recomendar un par de artículos donde hablo más en detalle de dos opciones aburridas, pero que pueden dar muchos beneficios si se toma la decisión de adoptarlas en una edad temprana.

Por ultimo emprender en un negocio, siendo joven y con un capital disponible, puede ser el mejor momento para desarrollar un emprendimiento, tendrás tiempo, energía y capital, una combinación absolutamente necesaria para comenzar una aventura de este tipo, el éxito esta para nada asegurado, pero incluso si todo termina en un fracaso, el aprender a levantarse y la experiencia que se puede ganar, puede ser clave para un futuro emprendimiento o para una nueva carrera profesional.

Adulto

Siendo una persona adulta, las opciones de inversión son más limitadas y, suele ocurrir que las personas en este segmento que reciben un dinero inesperado, ocupa este dinero para rebajar algunas deudas o para poder tomar unas vacaciones con la familia. Esto en si mismo no es algo negativo, pero si pensamos en que en unos años más, esa misma persona va a estar en una situación financiera, igual o peor, entonces ese dinero en realidad no sirvió de nada, solo fue una bocanada de aire para un ahogado.

En esta situación, quizás las mejores opciones va a ser instrumentos financieros más pasivos, poniéndonos en la situación de que una persona de este segmento no va a tener el tiempo que se requiere para invertir en un negocio que genere una renta adicional.Es por lo anterior que en esta situación las opciones pueden ir desde adquirir una segunda vivienda que se destine para el arriendo o un vehículo que se pueda arrendar para aplicaciones de transportes.

Por otro lado tenemos la opción de comenzar a generar un portafolio de inversiones diversificado que contemple un poco de acciones y de acciones que den dividendos. La idea de este punto no es dedicarse al hacer “Trading”, ya que para eso necesitamos dedicar una cantidad de tiempo equivalente a un segundo trabajo, sobre todo al principio; no, la idea es adquirir una serie de acciones, que por un lado tengan el horizonte de mantenerlas en el tiempo esperando que se valoricen para una venta futura y, por otro lado tener otro set de acciones que tengan la particularidad que entreguen dividendos, de tal forma de generar una suerte de sueldo extra intermitente.

A lo anterior se le puede sumar un DAP, pero eso va depender siempre de la tasa de interés que este instrumento este entregando, ya que dependiendo de que ciclo económico estemos pasando, puede ser conveniente mantener una cantidad de dinero en este instrumento y en otras ocasiones, solo puede ayudar a no perder tanto del capital como consecuencia de la inflación.

Personas Mayores

La recomendación en este segmento es muy transversal y va por la recomendación de instrumentos de muy bajo riesgo que más que nada ayude a que el patrimonio no pierda valor por efecto de la inflación.
Ahora bien, si nos ponemos en la piel de alguien que ya esta jubilado, pero sigue siendo una persona activa, de todas formas se puede pensar en comenzar un pequeño negocio, esto desde el punto de vista de que no tiene la ansiedad ni necesidad de que este sea un negocio exitoso.

El tipo de negocio que se puede desarrollar puede ir de la mano de la experiencia acumulada en la vida laboral, o por la experiencia adquirida por el desarrollo de una actividad paralela, como un hobbie; acá un ejemplo puede ser el desarrollo de una tienda de venta de flores poco comunes, cactus o suculentas.

En términos de instrumentos de inversión, se recomiendan los bonos del gobierno y depósitos a plazos cortos los cuales pueden ir desde un mes a 6 meses. Hay que considerar que en esta edad, es muy probable que la persona ya cuente con un patrimonio interesante y si a eso le suma el dinero que ha llegado de forma inesperada, entonces esa cantidad puede dar una buena cantidad en forma de intereses, que se pueda llegar a considerar como un sueldo adicional.

Otra mirada también puede ser la inversión en experiencias, es decir, aprovechar ese dinero para realizar todos los viajes que siempre quisimos realizar, pero que por tiempo o por dinero no se pudieron realizar, es una forma distinta de invertir en uno mismo.